miércoles, 23 de enero de 2008

Lobios (Orense)



Llueve sobre el mercadillo de Lobios. Aquí un matrimonio maduro duda ante una pila de pantalones vaqueros; ahí la pulpeira coge el pulpo, centro de todas las miradas, para meterlo en la bolsa de plástico; un poco más allá los calderos, alambiques y cacerolas de cobre; enfrente, los políticos venden su mercancía observados por una viejecita vestida de negro que a su vez vende paraguas al lado de un puesto donde venden hogazas.
Todos cobran por lo que dan, bueno... todos no. Hay alguien que entrega lo que más vale sin pedir nada a cambio; besa la tierra sumisa para que dé su fruto y recoge lo que sobra en el mar. Llueve sobre Lobios.
Ángel